Turberas de Chile

Bienvenidxs a Turberas de Chile: un espacio de alternativas concretas para hacer frente al cambio climático desde la Educación, Conservación y Renaturización  en torno a estos importantes ecosistemas de Chile y el hemisferio sur.  Periódicamente publicaremos y comentaremos artículos, metodologías y materiales sobre la génesis, la ecología, la biodiversidad y las funciones ecosistémicas de estos ambientes y otros maravillosos humedales del sur del mundo. También publicaremos notas sobre nuestras actividades de investigación y  difusión en torno a turberas y humedales.

¿Qué son las turberas?

Para empezar, es importante tener en cuenta algunas definiciones a fin de entender las turberas. Una de ellas es que la palabra turbera (en inglés “mire“) refiere a los ecosistemas prístinos donde actualmente se sigue formando turba; mientras que la palabra turbal (en inglés “peatland“) refiere a cualquier ecosistema que contiene turba. La turba por su parte (en inglés “peat”), es el sustrato que forma las turberas. La turba es un sustrato de materia orgánica que se forma por causa de la saturación del suelo, donde la vegetación que decae se acumula en la superficie, permaneciendo semi-decompuesta debido a la carencia de oxígeno  y formando un estrato (Succow & Jeschke 1986; Blanco y De la Balze, 2004). Por último, las turberas son un tipo de Humedal, y como tal, se encuentran dominadas por condiciones de saturación constante, por un superavit de agua, y por especies de plantas adaptadas para existir bajo tales condiciones.

Las turberas proliferaron principalmente en las altas latitudes de los hemisferios norte y sur después del último retroceso glaciar, hace 15.000 a 12.000 años antes del presente. Puesto que el suelo se hallaba saturado o semi-saturado de agua, la vegetación que decayó se acumuló en la superficie, permaneciendo semi-decompuesta debido a la carencia de oxígeno (anaerobismo), formando de este modo un estrato de materia orgánica conocido como turba (Succow & Jeschke 1986; Blanco y De la Balze, 2004).

Por una parte, las turberas tienen una importancia arqueológica, debido a que la turba conserva restos orgánicos en condiciones semidecompuestas, convirtiendo estos ecosistemas en uno de los archivos paleo-biológicos más importantes acerca de la historia del paisaje postglacial.

Por otra parte, la acumulación de turba es un proceso muy lento y es la base para la formación de los ecosistemas de turberas, por lo que  cualquier alteración de su vegetación e hidrología afectará severamente el desarrollo de los mismos. Conteniendo un superavit de agua no tan grande como para producir un cuerpo acuático permanente (e.g. un lago), pero lo suficiente como para mantener los suelos en condiciones húmedas permanentes, las turberas son ecosistemas de transición entre los ambientes terrestres y acuáticos. Sus capacidades de retención y filtración de agua son cruciales para la regulación de las descargas de nutrientes en las cuencas, para la purificación del agua y para la prevención de inundaciones. Las turberas representan una de las reservas de agua más efectivas del planeta, reteniendo >90% de su peso en agua.

También debido a que sus suelos están formados por la acumulación de materia orgánica, estos ecosistemas representan también eficientes reservas planetarias de carbono -Corg-, cubriendo sólo 3% de la superficie terrestre (4.16 x 106 km2) pero almacenando 15% a 30% (550-600 Gt) del carbono orgánico total presente en los primeros 30 cm de la litosfera (Joosten & Clarke, 2002).

Para ver detalles de las funciones y procesos en las turberas, haz click sobre la imagen

Por ende, dependiendo de su balance ecológico e hidrológico, las turberas pueden contribuir o aminorar el calentamiento global del clima. La destrucción y degradación de las turberas, por causas antropogénicas o naturales, puede convertir esto ecosistemas en emisores de gases de efecto invernadero, no sólo de dióxido de carbono, (CO2, la forma gasificada de Corg), sino también de metano (CH4), el cual tiene un efecto en el calentamiento global 23 veces más alto que el dióxido de carbono (IPCC-International Panel on Climate Change 2007).

Por ultimo, las turberas presentan una enorme biodiversidad específica, por lo cual conceptos clave para su clasificación deben ser considerados de forma global, i.e. aquellos que tratan sobre sus procesos de formación, pero llevados a cabo localmente, a fin de integrar sus características ecológicas específicas y generar medidas de protección apropiadas.

En Chile la mayoría de los ecosistemas de turberas permanecen bajo condiciones prístinas y regiones ecológicas como la Patagonia Chilena, donde estos ecosistemas ocupan cerca de 4.600.000 ha, significando un 70% del total de estos ambientes en Chile (CONAF et al. 1999b, actualizado en 2010) permanecen aún sin ser estudiadas ni visibilizadas, (CONAF, 1996) enfrentando por ello una alta vulnerabilidad, especialmente frente a intereses extractivos de entidades públicas (INIA-Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria, SERNAGEOMIN- Servicio Nacional de Geología y Minería) y de empresas privadas nacionales y extranjeras (Rodriguez & Gabriel, 2016).

Fuentes:

  • Blanco, D. y De la Balze, V. (Ed.) (2004): Los turbales de la Patagonia. Bases para su inventario y la conservación de su biodiversidad. Buenos Aires: Wetlands International. Available online at www.worldcat.org/oclc/163883710, checked on 5/2/2013, 35 pp.
  • CONAF; CONAMA; BIRF (1999b, actualized in 2010): Catastro y Evaluación de Recursos Vegetacionales Nativos de Chile. Informe Nacional con Variables Ambientales. Proyecto CONAF; CONAMA; BIRF. With assistance of Universidad Católica Temuco, Pontificia Universidad Católica de Chile, Universidad Austral de Chile. CONAF-Corporación Nacional Forestal; CONAMA-Comisión Nacional del Medioambiente; BIRF. Santiago de Chile, 91 pp.
  • IPCC-International Panel on Climate Change (2007): Zusammenfassung für politische Entscheidungsträger. Synthesebericht der Klimaänderung 2007: Wissenschaftliche Grundlagen. Beitrag der Arbeitsgruppe I zum Vierten Sachstandsbericht des Zwischenstaatlichen Ausschusses für Klimaänderung (IPCC). IPCC-International Panel on Climate Change. Valencia-España, 109 pp.
  • Joosten, H. and Clarke, D. (Ed.) (2002): Wise use of mires and peatlands. Background and principles including a framework for decision-making. [Finland]: International Mire Conservation Group; International Peat Society, 304 pp.
  • Rodriguez, A. C.; Gabriel, M. 2016: Mires exploitation and destruction in Chilean Patagonia as a consequence of insufficient environmental regulations. Bulletin N° 1610. International Mire Conservation Group-IMCG. Alemania.
  • Succow, M. und Jeschke, L. (Ed.) (1986): Moore in der Landschaft. Entstehung, Haushalt, Lebewelt, Verbreitung, Nutzung und Erhaltung der Moore. 1. Aufl., 1.-20. Tausend. Leipzig [u.a.]: Urania-Verlag, 268 pp.

Tipos de Turberas

En este menú te contaremos sobre el concepto “tipo hidrogeomórfico de turbera”. Este concepto es una herramienta para clasificar las turberas según ciertos estereotipos que resumen sus características hidrológicas y geomórficas.  También te contaremos que tipos dehidrogeomórficos de turberas hay en Chile y cuáles tipos de sustratos componen los suelos de estos ecosistemas.

Tipos Hidrogeomórficos de Turberas

Estas tipificaciones fueron ampliamente desarrolladas por los científicos alemanes Succow & Jeschcke (1986) y profundizadas más por Succow & Joosten (2001). Ellos definieron ocho “Tipos Hidrogenéticos de Turberas” distinguiendo entre “Turberas Horizontales” (horizontal mires), las cuales se forman  en paisajes de morfología plana; y “Turberas Inclinadas” (inclined mires), que se forman en paisajes de morfología sinuosa. Entre los tipos horizontales, estos autores distinguían las Turberas de Paludificación (paludification mires) influenciadas mayormente por incrementos en las napas freáticas; Turberas de Terrestrialización (terrestrialization mires) originadas a partir de lagos que fueron ocupados por la vegetación circundante; Turberas de Olla (kettle hole mire) localizadas en depresiones y alimentadas por escurrimientos superficiales desde el paisaje circundante; y Turberas de Inundación (flood mire), presentes a lo largo de ríos, esteros y otros cursos de agua en movimiento, y alimentadas por estos durante sus crecidas. Entre los tipos inclinados, se encuentran las Turberas de Colina  (sloping mire), alimentadas por escurrimientos de aguas superficiales en zonas inclinadas; las Turberas de Percolación (percolation mire), formadas por escurrimientos constantes y aportes de las napas freáticas en zonas inclinadas; las Turberas de Vertiente  (spring mire), formadas en zonas inclinadas y a partir de aportes hídricos de vertientes; y las Turberas Elevadas u Ombrogenéticas (raised mire or bog), alimentadas mayormente por precipitaciones.

Los ocho tipos hidrogenéticos (modificado de Meier-Uhlherr et al., 2011). Las flechas azules indican el origen de los flujos de agua hacia la turbera, mientras que las lineas punteadas indican el nivel de agua del suelo de la turbera.

Tipos Hidrogeomórficos de Turberas que se encuentran en Chile:

En la Patagonia Chilena, pueden ser reconocidos cinco tipos hidrogeomórficos de turberas: las turberas elevadas u ombrogenéticas (raised bogs), las turberas de colina (sloping bogs), las turberas de percolación (flow-through bogs), las turberas terrestrializadas-elevadas (terrestrialization bogs) y las turberas geogenéticas-terrestrializadas (terrestrialization fens).  Las turberas elevadas se forman en relieves planos y son principalmente alimentadas por agua de lluvia. Las turberas de colina se forman en colinas y zonas con pendiente donde existe aporte de agua lluvia, percolación y flujos laterales. Las turberas de percolación se forman en colinas, presentando un flujo de agua (canal) central y alimentación por agua lluvia y flujos laterales. Las turberas terrestrializadas-elevadas se formaron a partir de lagos glaciares relictos en depresiones intermontanas, que con el tiempo fueron ocupados por la vegetación circundante, tornándose su fuente hídrica principal el agua de lluvia y los escurrimientos superficiales. Las turberas geogenéticas-terrestrializadas se formaron a partir de lagos remanentes en depresiones del paisaje y tienen como principal fuente hídrica los escurrimientos superficiales, la percolación y el agua de las napas subterráneas.  Las descripciones específicas para los cinco tipos hidrogeomórficos de turberas que existen en la Patagonia Chilena puedes encontrarlas en los siguientes enlaces:

Fuentes: 

  • Meier-Uhlherr, R.; Schulz, C.; Luthardt, V. (2011): Steckbriefe Moorsubstrate. HNE-Hochschule für nachhaltige Entwicklung Eberswalde (FH). Berlin, 154 pp.
  • Rodríguez, A.C. (2015): Hydrogeomorphic classification of mire ecosystems within the Baker and Pascua Basins in the Region Aysén, Chilean Patagonia: a tool for their assessment and monitoring. Berlin-Germany: Humboldt Universität zu Berlin, 292 pp.
  • Succow, M. und Jeschke, L. (Ed.) (1986): Moore in der Landschaft. Entstehung, Haushalt, Lebewelt, Verbreitung, Nutzung und Erhaltung der Moore. 1. Aufl., 1.-20. Tausend. Leipzig [u.a.]: Urania-Verlag, 268 pp.
  • Succow, M. und Joosten, H. (Ed.) (2001): Landschaftsökologische Moorkunde. 2nd ed. Stuttgart: Schweizerbart, 622 pp.

Conservación

Para poder conservar las turberas, debemos entre otras cosas, conocer y respetar la vida que las habita, o sea, principalmente las plantas que las sustentan, las cuales están adaptadas a la presencia constante de agua. Así mismo es preciso conocer los procesos que pueden poner en riesgo estos ecosistemas y llegar a dañarlos. Y no menos importante, es emprender tareas educativas a todo nivel para promover su conservación. En este menú encontrarás información sobre estos temas y herramientas para apoyar tus proyectos de conservación y renaturización de turberas y humedales.

Quiénes somos

Somos Carolina y Marvin, profesionales en conservación y renaturización de turberas y humedales de Chile y el hemisferio sur. Hemos trabajado en varios continentes y ecosistemas, educando e investigando en pro de la protección y uso sostenible de estos ambientes. Tenemos experiencia en educación ambiental, institucional y comunitaria en torno a la gestión de humedales y turberas vulnerables. En Chile intentamos difundir nuestros conocimientos sobre la importancia y los funciones de las turberas mediante talleres e investigación .

Noticias

En los links asociados a esta página encontrarás noticias sobre turberas y humedales de Chile y el Hemisferio Sur.

Reflexiones sobre un camino futuro frente a la aprobación de la Ley de Protección Ambiental de Turberas en Chile y las indicaciones que se le hicieron

El 11 de Enero pasado la cámara de Diputados de Chile ha aprobado una Ley de Protección Ambiental de las Turberas que prohíbe la explotación e intervención de estos ecosistemas. Con ello Chile ha dado un gran paso en pro de la mitigación del cambio climático y la conservación del agua. Ello, tras diez años …

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Revista Austerra Society: sobre la situación de las turberas en Chile

Austerra Society es una revista digital que provee un espacio pensado para todas las personas que buscan y creen posible una relación en armonía con la naturaleza. Montserrat Montecino, periodista de Austerra,  nos invitó a conversar sobre las turberas. En entrevista con Carolina Rodríguez, profundizamos sobre la importancia de estos ecosistemas, y por qué urge protegerlos. https://www.austerra.org/carolina-rodriguez-investigadora-de-mires-of-chile-la-explotacion-de-las-turberas-esta-ocasionando-un-genocidio-ecosistemico/